viernes, 27 de marzo de 2009

Fareez

No existe la naturaleza humana, existe el comportamiento humano. Lo natural es comer dormir y amar; todo lo demás es un artificio creado y afianzado por la sociedad. Se aprende a matar y a trabajar aunque ninguna de las dos cosas sean imprescindibles. Entonces, así como a través del mito se ha fundamentado una aberrante fe en la ciencia y la religión, así también, con un poco de ahínco se podría afianzar la creencia de que inevitablemente todo cambia, hasta la sociedad en la que se vive.
Se dice que de la explosión de una estrella salieron todos los átomos del universo, humanos y otros artilugios; mas allá de una consciencia de simbiosis es el estribillo de una canción de Nirvana o la idea de Carl Sagan de que somos polvo de estrellas mirando polvo de estrellas.

viernes, 20 de marzo de 2009

Tektozu

Ir de lo simple a lo complejo pareciera ser el camino encontrado del pensamiento lógico. Sin embargo, el camino inverso, pese a estar plagado de obstáculos deja mayores enseñanzas. Mientras los años pasan, el progreso acumulativo de conocimiento se lee como progreso, pero de la ignorancia se pasa a la frustración. La supuesta sabiduría trunca la creatividad natural, el mapa mental tiene tantas vías para desarrollarse que no elige ninguna, la multiplicidad de conexiones hace corto circuito y lo que para alguien es una simple hoja en blanco se entiende como una amenaza.

viernes, 13 de marzo de 2009

Weevineev

Pareciera que el universo constantemente se desbarajusta, pierde el equilibrio y algo sin explicación sucede. No se trata del tarareado efecto mariposa, ni mucho menos la pregunta de por qué Dios deja sufrir a sus siervos. Lo que pasa es que para el sentir de la mayoría lo valioso de la experiencia es que cuando se vuelva a vivenciar un acontecimiento la madurez ganada con la repetición sirva para no cometer los mismos errores, una suerte de acumulación del conocimiento. Pero que tal si esto es precisamente lo errado, es decir, no sería mejor que después de un acto irresponsable, disoluto o reprobable siguiera uno completamente estúpido pero que logre borrar el primero de la memoria. Si bien esto no contribuiría a la reducción de crímenes graciosos al menos nos dejaría tranquilos con nosotros mismos al abandonar la estresante idea de mejorar constantemente.

viernes, 6 de marzo de 2009

Sariñana

Apenas abrimos los ojos cada mañana por alguna razón que se ha dado en llamar costumbre, pensamos en la irreductibilidad del conjunto de esquemas que ordenan la vida. Pero llega el hastío, la imperiosa necesidad de gritar, de salirse del camino cada vez más estrecho a punta de decisiones. Siempre se puede volver a empezar: cualquier día de cualquier año, al final o al comienzo de la vida consciente. Unos logran reprimir el deseo porque no lo entienden, otros prefieren la comodidad de lo conseguido, pero unos cuantos aún sabiendo que no va a ser fácil pasan la página, agradecen lo aprendido y se enfrentan al cambio. No importa si el mundo que vemos es real o no, tampoco si estamos en la capacidad de describirlo tal como es; para gustos colores y lo relevante es la manera como se hacen las cosas.

 
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