viernes, 8 de agosto de 2008

Georges Eugène H.

No es necesario haber crecido en la África subsahariana para pensar que las fronteras no existen, que son un invento de las potencias para repartirse los territorios. Sin embargo los nacionalismos relativamente recientes luchan por separar, por marcar la diferencia, por defender lo propio para encerrarlo en una urna de cristal y tarde o temprano verlo desaparecer. La globalización no es nueva, pero el capitalismo sí. El problema es enfrentar memoria y destrucción.

 
Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.